Después de varias pruebas por fin hemos dado con el resultado que estábamos buscando, nuestro primer plato fue una presa de cerdo en una costra de sal y chocolate a la que añadíamos un toque de tonka para aumentar el aroma. Pero el no poder comérsela era una cosa que no me terminaba de convencer desde hay dando vueltas hasta encontrar la receta perfecta para acompañar un magret de pato.